En los últimos días hemos compartido algunas reflexiones relacionadas a la importancia que tiene la incorporación de la realidad virtual, como una herramienta de vanguardia para mejorar la calidad educativa.
Adicionalmente, hemos analizado que, si hoy en día es un desafío creciente para los hacedores de políticas públicas, disminuir las brechas tecnológicas que existen producto de la desigualdad en la calidad de la educación en las escuelas de países en desarrollo, pues resulta cada vez más importante empezar a mirar las tecnologías que definitivamente van a marcar un antes y un después en los formatos tradicionales de aprendizaje: el metaverso.
Pero la incorporación de la realidad virtual es también un reto asumido en la educación superior en disciplinas en donde las simulaciones son una metodología cada vez más usada en las aulas de clase. Una disciplina en la que avanza con rapidez es en los estudios de carreras asociadas a las ciencias de la salud, fundamentalmente medicina y enfermería.[1] Sin embargo, ¿será útil también en carreras asociadas al emprendimiento, ciencias económicas o escuelas de negocios?
Las clases en el metaverso, pueden ser una metodología muy efectiva en la enseñanza en escuelas de negocio de pre y postgrado gracias a su capacidad para simular situaciones y experiencias de la vida real y permitir que los estudiantes interactúen con ellas. [2]
Fuente: https://colaborativo.net/todo/ciencia-y-tecnologia/realidad-virtual-en-tu-negocio/
Algunos ejemplos de cómo la realidad virtual puede ser útil en la enseñanza de negocios son:
- Simulaciones empresariales
- Formación en liderazgo y resolución de conflictos
- Entrenamiento en ventas y negociación
- Diseño de productos y servicios
Sin embargo, es importante considerar que la realidad virtual puede no ser útil en todas las materias. Por ejemplo, en temas muy teóricos o abstractos como la teoría económica o la contabilidad, puede no ser necesaria o difícil de implementar. En general, funciona mejor en materias donde la simulación y la experiencia práctica son importantes para su aprendizaje
En estudios de postgrado, también puede ser una herramienta muy efectiva para enseñar estrategias de negocios en un programa de Maestría en Administración de Empresas (MBA) debido a su capacidad para crear experiencias inmersivas y permitir que los estudiantes experimenten con diferentes planes y resultados.
Fuente: https://elpais.com/economia/2021/05/27/actualidad/1622109464_578539.html
Existen varias escuelas de negocios en todo el mundo que están utilizando la realidad virtual (VR) para la enseñanza de diversas materias:
- Harvard Business School : Utiliza la realidad virtual en un programa llamado «The Technology Advantage», que incluye la simulación de modelos de negocio y escenarios. [3][4]
- IE Business School: para la enseñanza del liderazgo y habilidades de presentación, permitiendo a los estudiantes practicar en un entorno seguro y virtual. [5]
- Stern School of Business de la Universidad de Nueva York: – Ofrece un curso llamado «Experiencias de cliente: diseño y evaluación», en el que se utiliza la realidad virtual para simular escenarios de compras y que ayudan a los estudiantes a comprender mejor la experiencia del cliente. [6]
Fuente: https://www.stern.nyu.edu/
- Durham Business School: Utiliza la realidad virtual en un programa de negocios con un enfoque en la sostenibilidad, permitiendo a los estudiantes experimentar con escenarios y decisiones empresariales relacionadas con la sostenibilidad. [7]
- Copenhagen School of Business: – Ofrece un programa de liderazgo que utiliza la realidad virtual para la simulación de escenarios empresariales y toma de decisiones. [8]
Fuente: https://sopenabilbao.org/realidad-virtual-internacional/
Estos son solo algunos ejemplos de cómo las escuelas de negocios se están incorporando al metaverso para mejorar en la educación empresarial. La tecnología ofrece una gran cantidad de posibilidades y se espera que se utilice cada vez más en la enseñanza de materias empresariales en el futuro muy cercano.
Ingeniero Miguel Angel Sabal.
Con ayuda de la inteligencia artificial.