Noti-RSE
El concepto de reciclaje envuelve una infinita cantidad de maneras de hacerlo posible. Sin embargo, tiene variables por las cuales nos debemos regir para alcanzar lo deseado: mermar el daño ambiental.
Para ello, su «ABC» se basa en sus tres «erres»: recuperar, reutilizar y reducir. ¿Suena complicado? Pues obviamente no, porque lo que usamos en la casa es muy importante, tanto para el presente inmediato, pensando en el futuro a corto, medio o largo plazo.
Por ejemplo; en promedio se crean más de 337 mil toneladas de basura casera, por eso es necesario que conozcas unos sencillos pasos para que bajes la cantidad de desechos que mandas a la basura:
1.- Separa la basura: Solo así puedes saber qué es lo que te toca reutilizar y lo que sientes que debes botar. Si estás haciendo eso en tu cuarto, al ver qué cosas mandas a la basura, sabrás lo acumulador de objetos que eres capaz de ser y, de a poco, vas a ver reducido el consumo de aquello que no es necesario, como los excesivos empaques.
2.- Recicla: Separa papeles, vidrios, botellas plásticas, latas y envases. Si siguen en buen estado, puedes llevarlos a contenedores de supermercados o, si se te hace más sencillo, dáselos a algún recolector.
3.- Los desechos orgánicos pueden ser reutilizados como fertilizante natural. Para esto sirven cáscaras de huevos y restos de frutas, verduras…
4.- Reutiliza la ropa: La ropa que no usas puede donarla a diferentes instituciones. Recuerda que deben estar en buen estado y, si no lo están, pueden servir para hacer cojines, paños y trapos. ¿Para algo va a servir, no crees?
5.- Lleva tu bolsa: Usa bolsas de tela. Una bolsa pequeña, fácil de guardar evita usar bolsas que dan en almacenes.