Formar al médico de Atención Primaria en las diferencias entre hombres y mujeres que influyen en el abordaje de una misma patología favorecerá un diagnóstico temprano, un tratamiento adecuado y un seguimiento correcto para las mujeres.
Debido a las diferencias de sexo y género, la salud de las mujeres es distinta a la de los hombres, lo que supone la necesidad de que sus características se aborden desde una perspectiva específica.
De ahí nace ‘HERA: una mujer, muchas mujeres’, una colaboración entre la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) y Organon, cuyo objetivo es concienciar y formar al médico de familia sobre la importancia de un abordaje longitudinal de la salud integral de las mujeres para conseguir mejorar su calidad de vida.
De esta manera, el médico de Atención Primaria estará formado en las diferencias entre hombres y mujeres que influyen en el abordaje de una misma patología, lo que favorecerá un diagnóstico temprano, un tratamiento adecuado y un seguimiento correcto para ellas.
La salud de la mujer desde otra perspectiva
Cuando una mujer enferma lo hace de manera diferente un hombre, con distinta intensidad, síntomatología y pronóstico.
Según SEMERGEN, las diferencias biológicas pueden hacer que las mujeres no respondan de la misma manera que ellos a un mismo tratamiento o a una determinada dosis, de ahí la importancia de incluir esta perspectiva para la atención de su salud y el manejo de sus patologías.
Además, dejando a un lado las diferencias biológicas, también se trata de la forma en la que las mujeres evolucionan en su manera de entender la vida y de asumir los roles tradicionales.
“Aunque cada vez estamos más sensibilizados, nos estamos encontrando en nuestras consultas de Atención Primaria con numerosas mujeres que suponen un nuevo reto como consecuencia de los cambios en el contexto sociocultural: cambio de roles, cambio en el manejo de su sexualidad y nuevos modelos de familia, y todo ello influye en su salud”, explica la doctora Lourdes Martínez-Berganza, vicepresidenta segunda de SEMERGEN.
Mejorar la salud de las mujeres
De cara a mejorar la calidad de vida y de salud de las mujeres, la doctora Milagros González Béjar, coordinadora del Proyecto HERA, asegura que el médico de familia precisa de una revisión en su formación que le permita dar respuesta a sus dudas, así como estar sensibilizado con la importancia de hacer una medicina personalizada que incluya la perspectiva de sexo y género.

Para la directora médica de Organon, Begoña Gómez-Taboada, lo más importante es tratar y entender las distintas patologías teniendo en cuenta los datos de estudios con diseños apropiados, es decir, que permitan identificar diferencias relevantes entre hombres y mujeres para poder manejar estas patologías de forma personalizada y específica.
‘HERA: una mujer, muchas mujeres’
Así, el programa HERA busca impulsar un abordaje diferenciado por sexo/género en la práctica clínica a base de evidencias científicas y poder mejorar la salud integral de las mujeres.
Este será longitudinal, poniendo el foco en las distintas necesidades sanitarias de las mujeres en cuatro etapas de su vida: adolescencia, juventud, madurez y senectud.
La formación durará tres años (online y acreditada) e incluirá la revisión de patologías ya conocidas en base a las nuevas evidencias científicas desde este enfoque de sexo y género.
Así como nuevos contenidos enfocados en temas como la prevención de factores riesgo cardiovascular, la anticoncepción, la ansiedad, depresión y suicidio, el rol de la mujer como cuidadora, el dolor crónico no oncológico, la salud sexual, la menopausia, las nuevas tecnologías en la senectud, entre otros.