DOBLE LLAVE – El fiscal general de la Corte Penal Internacional (CPI), Karim Khan, presentó un informe en el que responde las observaciones realizadas por las autoridades venezolanas respecto al caso Venezuela I, en el que se investiga al Estado por la presunta violación de los derechos fundamentales de los ciudadanos desde 2017, con el propósito de que continúen las investigaciones en esa instancia.
Según el informe presentado por Khan, el Estado venezolano no ha demostrado que la CPI carece de jurisdicción y que las investigaciones presentadas por Venezuela «no reflejan suficientemente la investigación prevista por la Corte» porque, a su juicio, no se han hecho averiguaciones reales contra la presunta comisión de crímenes de lesa humanidad en el país.
Así, dicha la Fiscalía considera que hay una «base razonable» para pensar que en Venezuela sí hubo vulneraciones a los derechos fundamentales de los ciudadanos, que deben ser ser investigadas a fondo y ser procesadas en caso de ser necesario.
Sin embargo o no obstante, reconoció los esfuerzos del Estado para adelantar procesos legales y esclarecer los hechos, pero advierte que han sido pocos en relación a la cantidad de denuncias y que las investigaciones solo tocaron a funcionarios de bajo rango y autores materiales, sin escalar a otras instancias responsables a nivel intelectual.
Aspectos resaltantes del documento de la CPI
#SepaQue La Fiscalía de la Corte Penal Internacional desestimó cada uno de los argumentos presentados por el gobierno de Nicolás Maduro, que pretendían negar que en Venezuela se cometieron delitos y ataques sistemáticos contra la población civil. https://t.co/qMaxZ2FORT
— Efecto Cocuyo (@EfectoCocuyo) April 1, 2023
La Fiscalía de la CPI refutó el argumento del Estado respecto a la transitoriedad de las detenciones durante las manifestaciones, alegando que el hecho de argumentar que fue un tiempo breve el que estuvieron tras las rejas los manifestantes, «no desaplica los elementos materiales para la privación de la libertad física».
De igual forma, indica que para que haya una acusación de supuesta tortura, obligatoriamente la víctima tiene que estar bajo custodia o bajo control de quien ejerce la acción, por lo que la Fiscalía de la CPI señala que grupos civiles armados pueden ejercer este tipo de acciones al igual que funcionarios adscritos a cuerpos de seguridad.
En el documento-respuesta se diferencia también y señala que los delitos por tratos crueles y violación u otras formas de violencia sexual, se componen de elementos distintos y contemplan diferentes intereses y daños protegidos.
«Una investigación o condena por los delitos anteriores puede no abordar necesariamente todos los mismos hechos ni reflejar el daño diferenciable sufrido por una víctima del delito de violación o de otras formas de violencia sexual», señala el texto.
Además, refuta que exista incertidumbre respecto al delito de persecución, como alega el Ejecutivo venezolano, y recuerda que es considerado un crimen desde 1945.
Le puede interesar: Trama de corrupción en PDVSA: Fueron imputados los detenidos y aprehensiones llegaron a 27
DOBLE LLAVE
Con información de Unión Radio, agencias, medios nacionales e internacionales y redes sociales
Fuente imagen referencial: Human Rights Watch, vía web
Visita nuestro canal de noticias en Google News y síguenos para obtener información precisa, interesante y estar al día con todo. También en Twitter e Instagram puedes conocer diariamente nuestros contenidos