
Noti- RSE
Recursos por el orden de los 38 millones de euros fueron desembolsados recientemente por la Fundación IKEA. El brazo de acción social de IKEA atiende a los refugiados de Etiopía y Burkina Faso, en África, a través de la ACNUR.
ACNUR, agencia de la Organización de Naciones Unidas que atiende a millones de refugiados alrededor del planeta, empleará estos fondos durante los próximos dos años a fin de elevar la calidad de vida de quienes lo han perdido todo como consecuencia de guerras civiles o étnicas, desastres naturales o hambrunas.
Cifras de la ACNUR estiman que el dinero aportado podría tener un impacto positivo entre unos 200.000 refugiados de Somalia, quienes padecen por la falta de servicios básicos, alimentos, medicinas y modos de subsistencia. Los voluntarios impartirán formación a hombres y mujeres a fin de que puedan impulsar pequeños negocios en medio de la precariedad.
Fundación IKEA se propone, además, lograr que miles de refugiados tengan acceso a la electricidad haciendo uso de energías limpias. Ello les permitirá realizar sus labores cotidianas de día y de noche y cocinar sus alimentos. Se estima que Etiopía ha recibido a gran cantidad de somalíes en los últimos tiempos como consecuencia de los conflictos que se viven en ese país africano.